Devorados- estracto

"DEVORADOS"




 Un extracto del borrador de mi novela, a ver si va tirando la cosa... o la tiro:

Sin que nadie se hubiese dado cuenta la pequeña Ana llevaba todo el día vigilando al vampiro. Mirando por la ventana que daba al patio interior del edificio, asomándose a la escalera con cualquier excusa y en definitiva, espiándolo. Supo que había estado en su piso hasta que, pasadas las siete y media y ya habiendo oscurecido hacía rato, lo vió salir y bajar las escaleras.
Con la puerta entreabierta, dejando sólo un mínimo resquicio por el que poder observar, lo siguió con sus vivos ojos hasta que desapareció por la planta inferior. Claro está que por las escaleras, pero desde donde vigilaba Ana más bien parecía que se fundía con el suelo. Una cualidad que según había averiguado poseen sólo los vampiros más poderosos.

Susi y Moha se habían marchado unos minutos antes, bien guapos como ella les dijo (lo que provocó la sonrisa y un beso de su madre y la más absoluta indiferencia en Moha) a una fiesta en la parte alta de la ciudad, o éso le dijeron.
Así que con todo el camino despejado Ana cogió las llaves de casa (no fuera a ser que, como suele ocurrir en las películas en estos casos, se le cerrara tras ella de golpe nada más atravesar el umbral) y también la nota que cuidadosamente había escrito.

En la penumbra de las escaleras sólo se escuchaban los sonidos del fútbol en televisores vecinos y alguna puerta de un piso superior que se abría pariendo a varios chicos que tomaban el ascensor entre risas y alboroto. Era sábado, no había duda.

Ana subió hasta el piso de arriba por las escaleras con paso meticuloso y el corazón bombeando sangre (¡SANGRE!) a un ritmo desquiciado. Cuando llegó frente a su puerta notó como se le erizaba el cabello de la nuca y le entraron ganas de orinar. Estaba allí. Justamente allí. Ante su guarida.
Hubiera dado caualquier cosa por poder entrar, aunque el miedo la estuviera apretujando como un cepo a la pata de un animal. Temía que en cualquier momento la puerta se abriera con violencia y encontrarse cara a cara con el montruo, que la miraría con los ojos inyectados en sangre, expresión ésta que Ana no entendía del todo pero que aparecía en todas las novelas de terror vampírico que había leído últimamente.
Pero no podía resistir la tentación. Acercó su mano al pomo de la puerta con una lentitud melodramática y se pasó la lengua por los labios para humedecerlos. Inútilmente pues tenía la boca seca. El sexo le ardía.

Giró el pomo de la puerta. Nada. Estaba cerrada, como era de esperar.

Un ruído a su espalda bronco y súbito la hizo girarse tan rápido como una peonza. Casi creyó verle moviéndose con irreal celeridad entre las sombras del rellano. El corazón parecía querer salirse de su pecho y descargas eléctricas desconocidas hasta ahora por sus trece años recorrieron su espalda.

Volvió a respirar al comprobar que sólo había sido un portazo en otro apartamento. Decidida a no tentar más a la suerte pasó la nota por debajo de la puerta y sin llegar a correr, pero a toda prisa, bajó las escaleras de vuelta a casa. El sudor resbalaba por todo el cuerpo y su piel, tersa y fría normalmente, le quemaba ahora como el infierno.

Nada más entrar al piso echó todos los cerrojos y trató de tranquilizarse. Poco a poco, mientras iba hacia su cuarto, se fue sintiendo mejor. En primer lugar porque se encontraba a salvo tras su peligrosa misión. Y en segundo por ese extraño regusto a placer, ácido y dulce a la vez, que da el hacer algo prohibido. 

Naturalmente gran parte de Ana sabía que estaba jugando, que los vampiros no existen y que su vecino, seguramente, se iba a limpiar el culo con su notita.
Pero ésa parte de su ser tenía en este momento mucha menos importancia que la otra, la que se aferraba, ya inutilmente, a la niñez. La que sí creía en él. La que soñaba con él. 

La que ahora, echada en la cama para recuperar el aliento, recogía el sudor de entre sus muslos con sus delicados dedos de uñas mordidas y manchas de rotulador mientras pensaba en él.

Y en ella...

Comentarios

  1. Vaya!! Con lo que me gusta a mí un vampiro... ¿Qué va a pasar cuando lea la nota de Ana? ¿Qué pone la nota? 🤔 Quiero más 👏👏

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